¿Cuántas veces intentamos infructuosamente administrar bien nuestro tiempo, ser productivas y tener nuestra casilla de correo al día?
Si bien los intentos son recurrentes muchas veces no lo logramos y nuestro correo entrante está repleto de e-mails, desde la cadena que te mandó una amiga hasta un mensaje importante de un cliente. ¡Todo allí! Y si sucede que durante el fin de semana ni abrimos el mail, ¡peor aún! Todo indica que deberemos dedicar mucho tiempo a poner nuestro e-mail en orden y tenemos mucho por hacer…
Generalmente, cuando nuestra casilla de correo se ve repleta de mensajes pendientes los miramos varias veces y no nos decidimos a tomar alguna acción con ellos entrando así en un círculo vicioso que nos impide avanzar.
¿Qué hacer cuando esto sucede?
La manera más simple de no abrumarse frente a una bandeja de correo entrante que nos desborda es no desesperarse y decidir inmediatamente dedicar al menos unos pocos minutos para al menos comenzar a cambiar.
Si tienes mucho por hacer, dedica al menos unos pocos minutos. Define cuantos minutos dedicarás a organizar tus e-mails. Sean 5 o 10 minutos, todo suma.
Como en todo gran proyecto, lo mejor es realizar la tarea paso a paso, o mejor dicho para este caso, e-mail por e-mail. Lo importante y clave será que tomes la decisión de mirar cada e-mail una sola vez y tomar alguna acción concreta con dicho correo. ¿Tienes que eliminarlo? ¿Tienes que archivarlo? ¿Tienes que realizar algún trabajo con él? ¿Tienes que responder con algún dato concreto?
Hay muchos correos que podrás procesar en pocos minutos. Avanza con ellos y deja de mirar y mirar, leer y releer los mensajes. Por ejemplo, así sientas pereza de buscar un teléfono o dato de contacto que te están solicitando, si efectivamente tomas acción, tal vez te tome menos de dos minutos procesar ese pedido….
Recuerda: antes de mirar el próximo e-mail, decide qué hacer con el que ya estás leyendo y hazlo.
La lectura de e-mails en una bandeja de entrada desbordada de mensajes generalmente nos invita a procrastinar. ¡Enfócate y toma acción, mail por mail! Verás que una vez que comienzas a tomar acción con cada correo sentirás satisfacción y ello te motivará a ser cada día más organizada y productiva en la gestión de tu correo electrónico.
¿Qué otros consejos o tips puedes compartir que nos ayuden a procesar más rápido nuestros e-mails? Gracias por compartir tus ideas escribiendo un comentario.
También podrían tener un mail personal y otra para cuestiones laborales…