Afortunadamente, las personas están cambiando sus hábitos alimenticios comunes -y generalmente poco saludables- por otros más sanos y ricos en nutrientes. Esto les brinda, no solo una alimentación balanceada sino también una vida mucho más plena y sin la presencia de enfermedades relacionadas con la mala alimentación, algo frecuentes en la vida diaria de las personas.

Cambiar la alimentación que llevamos para organizar un menú saludable es complejo, no podemos negarlo. Sin embargo, luego de una etapa de unos menos 2 meses creando un hábito alimenticio sano, será mucho más fácil y hasta lo llegaras a amar y disfrutar.
No debes tener miedo al cambio
Para empezar a organizar un menú saludable debes eliminar a grandes rasgos:
- lo que este empacado en bolsas de plástico,
- lo que contenga un alto porcentaje de grasa,
- lo que contenga mucha azúcar, y
- los enlatados, ya que contienen un alto porcentaje de conservantes que no son buenos para el organismo.
Reemplaza estos productos por alimentos naturales y frescos. Una buena idea es comprarlos en algún mercado local de frutas y verduras que generalmente vende productos frescos y a buenos precios.
Los productos que compramos ya preparados, pierden nutrientes con el proceso y, si bien muchas veces nos ahorran tiempo, no son demasiado saludables.
Para organizar un menú saludable debes poner de tu parte
Deja la pereza de lado y trabaja con tu conciencia. Una buena variedad de productos naturales te ofrecerá un equilibrio en tu nutrición, abarcando todos los recursos vitamínicos que necesita tu cuerpo. Más aún, redundará tu salud, tus defensas, tu nivel de energía, etc.
Los elementos principales que debes tener para organizar un menú saludable no necesariamente implican dejar de comer “cosas ricas”. Apelando a tu creatividad e ingenio podrás preparar un menú delicioso y saludable basado en los siguientes elementos:
- Productos a base de leche. Ingiere dos raciones al día, son una fuente de calcio muy importante.
- Aceites vegetales a base de oliva y girasol. Reducen el riesgo de tener colesterol.
- Variedad de verduras. Incluye al menos dos en el menú del día, son importantes para limpiar el organismo y la piel.
- Frutas. La fruta debe estar presente en todas las comidas, todos los días. Es recomendable ingerir las dulces por la mañana y las cítricas por la tarde.
- Cereales. Los cereales pueden estar presentes en el desayuno o entre el almuerzo y la cena, son una fuente de fibra muy importante para la digestión del organismo.
- Agua, grandes cantidades de agua. Hidratar el cuerpo al máximo y eliminar impurezas.
- Pescado. El pescado es un elemento que puedes incluir una vez entre semana, es una gran fuente de Omega 3.
- Carne. También la carne debe estar presente de forma discreta durante el mes, es una fuente de proteína muy importante pero no se debe exceder su consumo, ya que es muy difícil digerir.
Conclusión
Dedicar algún tiempo a cambiar nuestros hábitos alimenticios para incluir un menú saludable requiere de algún esfuerzo. Sin embargo, una buena alimentación contribuirá para que te sientas mejor y logres mayores niveles de energía que luego redundan en tu nivel de productividad personal, ¡incrementándolo!
Y tú, ¿te preocupas por incluir en tu vida un menú saludable?
Cuéntanos y aporta tus ideas, consejos y hábitos de alimentación.
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