
Quizás resulte un poco complicado trabajar desde casa y saber conciliar la vida familiar y el trabajo. Hay que saber organizarse, tener una estructura de trabajo, una rutina y poco a poco los niños entienden y se acompañan en tu labor. Lo mas lindo es que puedes trabajar y a la vez disfrutar de tus hijos en los primeros años de vida.
Trabajar desde casa tiene sus ventajas y es maravilloso, cómodo, sin requerimientos de tener que salir de mañana, sin tener que estar en una oficina con la sombra de nuestro jefe en la espalda. Y también, estar disponibles si nuestros hijos se enferman y necesitas estar en #casa sin necesidad de tener que ausentarse del trabajo.
Hay que saber organizarse muy bien para trabajar desde casa. No basta con levantarse, sentarse en el escritorio y comenzar a trabajar.
Debemos definir nuestros horarios de trabajo. Tenemos que ser constantes, tener el ritmo marcado de trabajo, ser sumamente responsables ya que el hecho de no tener un jefe que controle horarios de entrada y salida no es excusa suficiente para dejar de ser eficientes en lo que hacemos. ¡Organízate, levántate temprano!

Hay ocasiones en que estamos trabajando y nuestros niños demandan atención, quieren jugar, están aburridos, tienen hambre, se pelean, y más. Aquí lo que podemos hacer es volver a explicarle que trabajamos desde casa, que tenemos algunos temas de trabajo que resolver y darle la atención que merecen, siempre con la mayor de la paciencia que podamos lograr. Y si nuestro trabajo es adecuado para ser compartido con ellos podemos invitarlos a que colaboren, ellos aprenden algo nuevo, se sienten parte activa y entienden a qué se dedica su madre, las tareas que realiza y además pasan tiempo juntos.
Si trabajas con tu computadora y teléfono, te encontrarás viendo a tu niña, haciendo lo mismo que ti, jugará a escribir en teclado, a enviar audios, y hasta hacerte callar porque está “hablando por teléfono”, toman todo lo que haces y lo hacen…

Tu lugar deberá estar ordenado, si está en otra habitación mejor, el que esté ordenado y limpio nos ayuda a no desconcentrarnos mirando ese desorden y ayuda a que tu estado de ánimo sea optimo y tu rendimiento aumente.
Bríndales tiempo de calidad, juega con ellos, sal a caminar, andar en bicicleta, miren dibujos juntos. Darles calidad en la atención es primordial. Dedícales un rato de exclusividad y verás que tu rendimiento también aumenta, ellos estarán felices y tu satisfecha de haber compartido con ellos un momento hermoso.
Todo se puede lograr si tienes equilibrio, no podemos estar encerradas todo el día en un cuarto trabajando, cuando tienes niños en casa, debes ser malabarista, y buscar ese equilibrio entre casa-trabajo-familia. Tener horarios delimitados, una hora de inicio y una hora de fin de jornada laboral, horarios de almuerzos compartidos, de recreación.

¡La base es la organización! Adaptarnos a estos cambios de vida, nuevas modalidades, ser estructurados sin dejar de ser flexibles, saber encontrar el equilibrio es fundamental.
ORGM
Cuéntanos, ¿Cómo haces tú para organizarte con los niños y el trabajo en casa? ¡Nos encanta leerte!
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